Palacio de las Leyes,
del que desgraciadamente solo queda la portada, ya que fue destruido por un
incendio en 1923. Por la belleza de su portada del siglo XV, se puede imaginar cómo
era el resto. Se llama así porque en él se celebraron las famosas Cortes de
Toro del año 1505.
Puerta de la Corredera - Abierta en el tercer recinto amurallado. Se construyo en 1602 en honor a Felipe III
Ermita Ntra. Sra. del Canto y en su interior la imagen de la Virgen del Canto, Patrona de Toro.
San Lorenzo, iglesia de estilo románico mudéjar fue edificada entre los siglos XII y XIII, alberga en su interior los sepulcros góticos de Pedro de Castilla y su esposa, Beatriz de Fonseca, así como un retablo con tablas hispano flamencas de Fernando Gallego.
La Colegiata de Santa
María es el edificio más bello, y también
el más representativo de la ciudad. Se comenzó a construir a mediados del siglo
XII y se finalizó bien entrado el XIII. Como tantas veces, lo construido a
caballo entre dos siglos recoge características de diferentes estilos, de aquí que
este edificio siendo un templo románico, participa de muchos rasgos góticos. Su
elemento más singular es el cimborio que remata la cúpula de la nave central,
aunque el elemento artístico más destacado es la Puerta de Occidente o de la
Majestad. Es un hermoso pórtico ricamente decorado y policromado, de estilo
claramente gótico.
Arco del Reloj,
esta torre que preside el corazón urbano de Toro se asienta sobre una antigua
puerta de la primitiva muralla. Fue edificada en el siglo XVIII y cuenta la
leyenda que siendo muy caro subir el agua del rio Duero para fabricar la masa,
ésta fue sustituida por vino dada la enorme cantidad que se almacenaba en las
bodegas del pueblo.
Ayuntamiento y Plaza Mayor
Toro es una
ciudad histórica y monumental. Histórica porque entre los siglos XII y XVI fue
sede real y lugar de celebración de Cortes. Monumental porque, gracias a este
periodo de esplendor, se construyeron grandes edificios, públicos y privados,
algunos realmente notables. Lo más grato de pasear por esta ciudad es el sabor
medieval que nos aguarda en cada uno de sus rincones.
Puerta de Santa Catalina, abierta en el tercer recinto amurallado. Se construyo en el siglo XVIII y en ella juro Felipe II respetar los Fueros de la ciudad.
El Monasterio de
Sancti Espíritus es otro de los grandes monumentos de Toro. Fue fundado en
el año 1316 y en él se pueden ver, entre otros, el sepulcro de Beatriz de
Portugal, una obra realizada en alabastro. El claustro es del siglo XVI,
compuesto por cuatro galerías y 48 columnas.
El Arco del Postigo,
pertenece a la muralla primitiva de Toro y encierra la capilla de Ntra. Sra. de
la Antigua.
Los vinos de Toro cuentan con una gran tradición y sus orígenes
son anteriores al asentamiento de los romanos. En los años 70 del pasado siglo
se dan los primeros pasos para crear la Denominación de Origen Toro, que llega a culminarse el 1987. En la
actualidad el Consejo Regulador de D. O.
Toro avala la calidad de 59 bodegas.
Los vinos tintos se elaboran principalmente con la variedad de
uva Tinta de Toro. Dadas las condiciones climatológicas de la zona (inviernos
rigurosos con bajas temperaturas y prolongado periodo de heladas, con veranos
cortos y no excesivamente calurosos), la variedad Tinta de Toro madura temprano
y hacen que los vinos de Toro sean tan excelentes.
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